Impermeabilizacion edificios en Gustavo A. Madero: Precio y Presupuestos

Error 1: No verificar la pendiente

Las losas planas, que son comunes en toda clase de edificaciones en Gustavo A. Madero, deben revisarse cuidadosamente antes de tratarse con una solución impermeabilizante. Durante la revisión inicial es preciso ubicar grietas y zonas vulnerables y lo más importante: Detectar la dirección en la que se encuentra la pendiente superficial.

Para que el propietario esté seguro de que el profesional que se está encargando de la impermeabilización de su inmueble, está prestando atención a estos puntos, debe verificar que se realice una sencilla prueba que implica inundar levemente la zona que está trabajando. Esta prueba también permite saber si las grietas reparadas siguen filtrándose y si existen hundimientos que no se aprecian a simple vista.

Error 2: Incorrecta aplicación de geomembranas

A menudo, durante la impermeabilización de edificios en Gustavo A. Madero, es necesario echar mano de geomembranas, particularmente cuando las losas y techos albergan jardines o bien terrazas y estacionamientos que tienden a acumular agua en la época de lluvia. 

No es extraño que, durante la instalación, la membrana se aplique corta en las guarniciones o muros laterales. Esto hace que la humedad se cuele fácilmente entre la membrana y la superficie donde se aplicó y, que al cabo, se presenten goteras y humedades. Para que esto no ocurra, el instalador debe tener conocimientos acerca del manejo de geomembrana, pues de esa manera se asegurará la correcta aplicación en toda la superficie.

Cabe realizar, además, la prueba mencionada anteriormente, ya que sirve para comprobar el sellado correcto del manto en todos los rincones.

Error 3: Corrección de fallos de estructura o albañilería con impermeabilizante

Un error grave es aplicar una solución impermeabilizante (cualquiera que sea) si el inmueble en Gustavo A. Madero presenta grietas importantes, desprendimiento de los revestimientos, o bien, superficies altamente porosas que comienzan a desmoronarse. El propietario debe entender que si solicita los servicios de un auténtico profesional y este descubre que el edificio en cuestión presenta este tipo de problemas, lo más seguro es que le recomiende consultar a un ingeniero, arquitecto o maestro de obras que determine qué procedimiento hay que seguir para reparar la estructura y sus acabados. Sólo entonces será posible buscar un método impermeabilizante adecuado que brinde buenos resultados.